Director: Im Kwon-taek Guion: Hong song-yu Reparto: Park sang-min, Lee IL-Jae, Shin Hyeon-jun Después de salir de prisión, Kim Doo-han regresa a su pueblo donde le
esperan todos sus hermanos y seguidores de la banda. Tras un cierto tiempo de
celebraciones y reencuentros, le explican lo delicada que está la
situación actual. Los Yakuzas están acabando con el mercado y los distritos
coreanos, demasiadas palizas, robos y tasas desorbitadas a los comerciantes. Kim Doo-han regresará con más fuerza que nunca, para intentar recuperar lo que
un día fue su territorio.
En General's son II, nos encontramos con una secuela muy parecida a su
antecesora, de producción impecable, interpretaciones muy buenas, pero con unas
coreografías más espectaculares y mucho más crudas y violentas. Claramente es
una cinta continuista, ya que no aporta nada nuevo: mismas localizaciones y
casi los mismos personajes. Una historia sobre el desamor, la traición y el
honor entre hermanos de banda.
Su director Im Kwon-taek enfoca la historia más a la acción, dejando a un
lado la esencia básica del biopic tradicional. Aunque esta historia es un tanto
más enérgica, el director tiene tiempo para mostrarnos el lado más humano del gánster
coreano, con una historia sobre la pérdida y amor. El film rebosa elegancia y
suciedad a partes iguales, el contraste de los carísimos trajes de nuestro
protagonista con el trasfondo derrotista de aquella época, le sientan muy bien,
reflejan las dos caras de aquella dura época de Corea, donde las influencias
extranjeras hacían que se perdiese la tradición propia.
La banda sonora sigue siendo un factor muy importante en el film, clásica y
tradicional, los momentos de paz se reflejan en los temas interpretados por los
integrantes de la banda en el Nightclub. General's son es una cinta violenta, que nos muestra la hostilidad que se
vivía en las calles de aquella época, ocupada por el ejército japonés y por los
Yakuzas. Se nota muchísimo la implicación de Jung Doo Hong en la dirección de
las coreografías y escenas de dobles, mostrando algunos movimientos y planos
que veríamos en futuras producciones coreanas de éxito. Mejores coreografías y
mucho más vistosas.
En definitiva, si te gustó la primera parte, no dudes en darle una oportunidad
a su secuela, más violenta y con más acción (atención al pequeño cameo de Jung
Doo Hong).
Lo mejor: Una obra mucho más enfocada a la acción.
Combates bien coreografiados.
Su clímax final es brutal.
Lo peor: Para los no fans del género, puede llegar a ser un film repetitivo
y que no aporta demasiado a la historia.
"Te invoco Bunshinsaba" Director: River Huang Guion: River Huang Reparto: Lei Ming, Wan Quinglin, Jiandi Zhu. Xiao Xin es una joven que sufre graves alucinaciones, apariciones terroríficas de una mujer pálida de cabello largo la atemorizan a todas horas, las medicinas que le recetaron ya no le causan efecto. Un buen día, sus amigos deciden hacer ouija para reírse y animar un poco a nuestra protagonista (todo muy normal sí), con tan mala suerte que invocan a la Yurei Bunshinsaba, un espíritu vengador del más allá. Pero sorprendentemente otro ser maligno ha aparecido y les dará caza uno por uno. ¿Podrán sobrevivir a esta cruel maldición? Bunshinsaba vs Sadako es un divertidísimo exploit chino de las dos figuras más conocidas del terror coreano y japonés. Tal y como nos explica Domingo López en los extras del DVD de Trashorama, su primera parte fue un fracaso de público y crítica, pero por algún motivo (quizás paranormal) el director lo intentó con esta segunda parte, la cual, para sorpresa de muchos, fue vista por más de diez millones de personas, un éxito total.
Estamos ante una cinta que no da tregua, excesiva y muy loca por momentos, repleta de sustos casi cada minuto y apariciones continuas de las Yurei (fantasma vengativo en forma de mujer con cabellos largos) a cuál más variopinta.
Su primera parte roza más el género slasher que el terror fantasmal, con el típico grupo de adolescentes que deciden jugar a la ouija e invocar el mal más puro. Uno a uno serán cazados y perseguidos por Sadako. Sorprende la cantidad de veces que la Yurei aparece de diferentes formas, desde espejos, del lavabo, de cuadros, incluso de un monitor y hasta realidad aumentada desde un iPhone. Su segunda mitad evoluciona hacia un bizarrismo exquisito que no os desvelaremos en estas líneas, pero que es un disfrute para los amantes del género. Una locura. El nivel interpretativo de la cinta es bastante limitado, muchas caras bonitas y demasiados lloros, con algún que otro momento Manuela, dramático de telenovela, pero que no empaña en absoluto este loco exploit chino. En su guion no pueden faltar los momentos ilógicos e incluso el humor absurdo intencionado (que le sienta estupendamente). Esto nos demuestra lo poco que se toma en serio así mismo el propio film.
En definitiva, una producción repleta de acción paranormal y FX resultones, Sadako vs Bunshinsaba es un sano entretenimiento para mentes abiertas que quieran disfrutar sin prejuicios. Otra exclusiva en nuestro país gracias a Trashorama y su sello Made in china, una distribuidora que encabeza Domingo López. Estamos ansiosos por saber cuáles serán los futuros estrenos.
Lo mejor: Su segunda parte y su clímax final son una locura. Los dos caza fantasmas y sus artilugios paranormales, muy divertido.
Lo peor: Si no te gustan este tipo de exploits, huye, no es tu película. Esperar a su tercera parte, queremos más versus como este.
"No hay vuelta atrás" Director: Johnnie To Guion: Yau Nai-Hoi, Yip Ting-shing, Au Kin-Yee. Reparto: Louis Koo, Aron Kwok, Cherry Ying, Tony Leung Ka Fai. Un Judoca que viaja por el mundo retando a la gente, una chica que sueña con ser Idol del pop en Japón, y un ex campeón de Judo que dejó todo para ahogarse en alcohol, en un nightclub de Jazz del cual es el dueño. Tres historias que se cruzarán para volver a descubrir la amistad, el amor y la pasión por la vida. Throw down de Johnnie To es posiblemente una de sus obras más perfectas y personales, una historia sobre la motivación y los sueños no cumplidos, las segundas oportunidades, el respeto y la aceptación. La pérdida en la vida hace que a veces tomemos caminos equivocados y busquemos salidas donde hay muros. To nos muestra a tres personajes increíbles: el Judoca motivado que ha encontrado su camino, la chica que desea ser idol del pop en Japón y el ex judoca atrapado en su propio infierno, esperando que se habrán puertas donde sólo hay piedra.
Como siempre, el maestro Hongkonés no necesita demasiadas localizaciones para crear una joya cinematográfica (Véase P. T. U. interpretada por uno de sus actores fetiches, Simon Yam). Johnnie To nos regala una obra local, agradable y de ligero sentido del humor, en combinación con un brillante trabajo de fotografía, de corte clásico, poco colorista y mimada al máximo. Cheng Siu-Keng se encarga de ella, un fiel ayudante que acompaña al director desde hace ya unas décadas, dejando su sello personal en casi todas sus mejores producciones. Peter Kam (compositor de casi toda la filmografía de Pang ho Cheung) se encarga de componer la fantástica banda sonora, elegante, agradable y con regusto clásico.
Johnnie To usa el Judo con respeto y delicadeza, mostrándonos la pasión, el respeto y dedicación que conllevan las artes marciales. Sanshiro de Akira Kurosawa está muy presente en Throw down a modo de homenaje, su banda sonora y espíritu están reflejados en uno de los personajes secundarios, así como en su soberbio clímax final. El reparto de esta historia Hongkonesa es alucinante, repleto de caras conocidas y con tres protagonistas que dan un poco de luz al grisáceo tono urbano. Louis Koo, Aron Kwok y Cherry Ying, interpretan a tres personajes carismáticos de una manera natural y realista.
En definitiva, Throw Down es cine en estado puro, una cinta que va más allá de los géneros, rodada con maestría y de milimétrica ejecución, otra joya en la filmografía del maestro To. Imprescindible. Lo mejor: Absolutamente todo, si amas el cine, debes verla. Lo peor: Creerte que Johnnie To solo hace cine de triadas y policíaco. En Throw Down no encontrarás lo que buscas.
