viernes, 29 de enero de 2021

A dirty carnival (2006, Corea del sur)

 "Haz algo que mantenga el verdadero espíritu gángster."

Director:
Yoo Ha
Guion: Yoo Ha
Reparto: Jo In-Sung, Chun Ho-jin, Min Nam-koong, Lee Bo-young

Byung-doo es un joven que se dedica, con su humilde banda de gángsters, a cobrar deudas para un jefe mafioso local. Las cosas no les van del todo bien y los ingresos que reciben no les llegan ni para comer. Debe hacer algo rápido ya que la situación se está volviendo insostenible. Después de pensarlo durante un tiempo, Byung-doo aceptará un peligroso encargo de uno de los jefes de alto cargo con tal de subir puestos e inyectar dinero en su pequeña banda.

Si hay algo que nos apasiona en el blog, es el cine moderno de gángsters coreano, que con sus propuestas consiguen emocionarnos gracias a su elegancia, su estilizada pero a la vez cruda violencia y sus múltiples matices que lo hacen un subgénero fascinante.

Hoy os hablaremos de A dirty carnival, una excelente cinta
que todavía hoy en día nos sigue maravillando y que pudimos disfrutar hace más de 15 años en pantalla grande dentro del ya desaparecido festival Baff. Sin más dilación comenzamos.

Si hay un nombre que está estrechamente relacionado con el cine de mafias es el director Yoo Ha, que gracias a tres obras, A dirty carnival, Gangnam blues y Once upon a time on High School (esta más enfocada en la adolescencia), se posiciona como uno de los más importantes en este género aún teniendo pocas cintas en su interesante filmografía.

Con A dirty Carnival, Yoo Ha nos regala una obra muy clásica, elegante y de violencia cruda y directa. Un impecable ejercicio de cine negro que resalta por su aire romántico y su construcción casi episódica gracias a las pequeñas piezas que interpretan nuestros protagonistas en la sala de Karaoke (todas y cada una de ellas repletas de matices y perfectamente integradas en la trama) donde veremos florecer las intenciones de cada individuo de una manera brillante e ingeniosa.
 
 
La música es un factor muy importante, como si de un protagonista más se tratara, dotando al film de una perfecta armonía gracias a los numerosos tangos y valses que posee su exquisita banda sonora, todos ellos interpretados delicadamente con instrumentos clásicos que potencian aún más el clímax de algunas escenas de manera magnifica. No podemos quitarnos de la cabeza el Ddaeng Beol de Kang Jin interpretado por Jo In-Sung y su banda, un tema recurrente y muy importante para entender al joven Byung-doo. Maravilloso!

La figura de Jo In-Sung es algo que agradecemos ver en este tipo de cintas (A dirty carnival, The King) que con su presencia, su aire juvenil y de inocencia, consigue ese contrapunto perfecto de agresividad y romanticismo que tanto le gusta implementar al director en sus obras (recordemos que sus primeras películas eran dramas románticos y eso se nota en sus producciones). Jo In-Sung demuestra lo buen actor que es con una poderosa interpretación tanto en lo físico como en el ámbito dramático, enamorándonos desde el primer minuto con su dulzura pero también con su ferocidad en las realistas y crueles escenas de acción. Al fin y al cabo, A dirty Carnival, es una historia de amor y odio dentro de una espiral de violencia en donde cualquier sueño se verá truncado por las acciones del pasado.

"Tan lejos como mis ojos pueden ver, las sombras se dirigen hacia mí"
 
El resto de personajes están muy bien construidos y enriquecen, si cabe aun más, este oscuro mundo que se nos plantea en el film.
 
 
En definitiva, A dirty Carnival, es una cinta imprescindible dentro de la filmografía moderna coreana, un magistral ejercicio de cine negro que maravillará a los amantes del género, pero también gustará a los seguidores de las grandes historias de amor. No os la perdáis.

Lo mejor: Ejecución impecable y elegancia abrumadora.
Su banda sonora.
Jo In-Sung.

Lo peor: Que no la hayas visto todavía.
 
TRAILER