Nos levantamos hechos una verdadera desgracia. Las fiestas son parte de Sitges, pero esta fue tal, que al día siguiente no sabíamos donde meternos. Nuestro amigo Alex no paraba de decir "oh", "oh god" (imaginad esto con voz de Darth Vader y entenderéis porqué nos hartamos de reír con él esa mañana). Aún así se zampó unos donuts y un café como un campeón. El resto nos fuimos con el estómago vacío a ver la peli de Miike, Lessons of the Evil. Que sepáis que es de valientes levantarse pronto para ir a las diez de la mañana a ver esa película, la cual por cierto nos encantó. Miike no nos decepcionó en ningún momento: profesor loquer, estudiantes de instituto y mucha muuuuuuuucha sangre. Como corrían los pobres adolescentes de un lado a otro sin saber lo que les esperaba, que despiporre, que bestialidad, que elegancia y adorabilidad a partes iguales del profesor, que música tan bien escogida (Mac the knife). Salimos encantados de ver la película, y ahí fue cuando la verdadera resaca nos alcanzó. Por suerte para nosotros el día no iba a ser nada complicado. Teníamos una entrevista programada con Park Hoon-jung, director y guionista de New World (y guionista de I saw the Devil), y un poquito de Miyazaki para finalizar el festival.
Así que como último día de festival nos plantamos en la cafetería del Melià a comernos unas hamburguesas y unos club sandwich y acabar de preparar la entrevista.
Park Hoon-jung es un señor adorable, muy inteligente y pensativo. La entrevista, aunque corta, fue una delicia. Hablamos con él de su nueva película, New World e intentamos sonsacarle un poquito de información sobre su nuevo proyecto, pero se hizo el remolón.
The Wind Rises empezaba a las 22:45, así que tuvimos tiempo de finalizar nuestra estancia en el festival con un homenaje en el SoCa, un bonito restaurante californiano del centro de Sitges donde hacen unas hamburguesas excelentes.
Y sin más dilación nos esperaba en el Auditori, The Wind Rises, la última película del maestro Miyazaki. La verdad es que nos decepcionó un poco. Esperábamos ver algo un poco más épico, siendo ésta la última película que iba a realizar.
Y hasta aquí nuestras peripecias por el Sitges film festival 2014. Como siempre un placer, un gusto.
Y hasta aquí nuestras peripecias por el Sitges film festival 2014. Como siempre un placer, un gusto.
Hasta pronto Sitges!
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