"Siempre me han gustado las películas un poco tontas"
M: Bueno yo soy Mike, de un Blog de cine asiático., y me gustaría en primer lugar darle la enhorabuena por la sesión de ayer.
H: El público era mucho más guapo que yo. Me gustaría agradecer a la organización, destacar que para proyectar mi película hay que estar un poco loco, supongo la organización, de algún modo, lo está.
M: Por eso nos gusta Tetsudon, porque todos estamos un poco locos.
Me gustaría que me explicara un poco qué es Tetsudon y qué significa en Japón, si hacen algún festival... porque me sorprendió mucho, fue una experiencia para mí ya que, a pesar de tener mucho sueño, su película nos enganchó.
H: Antiguamente, era un evento en vivo, un festival que mezclaba películas, en su mayoría cortos, con comedia en vivo. Se hicieron 10 ediciones.
M: ¿Cada cuánto tiempo se realizan este tipo de festivales?
H: En la actualidad el festival ha cambiado su estilo, ya no cuenta con la parte en vivo, desde hace tres años, sólo se proyectan películas. Pero a pesar de todo, durante la presentación de la película siempre hago un poco de show en directo.
M: Me sorprendió mucho que durante la proyección, se animara al público a expresar su opinión sobre cada uno de los cortos (aplaudiendo, abucheando, etc.)
H: Este sistema es único en Japón.
M: ¿Cómo se interesó por este tipo de películas? ¿Y por qué anima al público a expresar su opinión en la misma sala?
H: Por un lado, siempre me han gustado las películas un “poco tontas” y por otro lado, en Japón el público en el cine siempre está en silencio, y esto es cada vez más estricto: no se puede aplaudir, no se puede hablar, ni hacer ruidos... de este modo se puede controlar mejor al público. Como yo no estaba contento con este tipo de represión en los cines, me propuse cambiar el modo en el que el público reacciona con las películas para que puedan disfrutar y expresar libremente su opinión.
M: Hablando claro, creo que los cines en Japón son una mierda…
Le gusta más el ambiente de aquí, normalmente, en España, y en Cataluña, en los festivales de cine de terror, fantástico, asiático, el público siempre aplaude o abuchea, y expresa su opinión libremente. Por eso disfrutamos mucho la experiencia de la proyección de Tetsudon con cortos muy buenos y muy malos…
H: Está hecho a conciencia para que el público se divierta de ambos modos, si quisiéramos podríamos hacer una película sólo con los cortos buenos, pero entonces el público no podría abuchear y sobre todo gritar “quiero mi dinero!”
En este caso, me comporto más como un director de orquesta que como un productor al uso. Y quise que esto quedara patente en mi propio nombre Hoshino, Reiji es mi nombre artístico, Regi es una palabra en italiano que significa sostener, en términos futbolísticos sería el que aguanta el balón.
M: Referente a los cortos, no me quedó claro si son todos de directores y actores profesionales, o bien son aficionados, no profesionales, que le envían estos cortos para su inclusión en la película.
H: Los dos casos. Hasta la fecha había 70 directores, muchos de los actores no han cobrado por aparecer en los cortos, porque les compensa el saber que la película tendrá gran repercusión en el público.
M: Estaríamos haciendo muchas más preguntas, pero están esperando otros compañeros. Solamente reiterar nuestra enhorabuena por Tetsudon, que ha sido una experiencia muy divertida, nueva y sorprendente. Nos lo pasamos muy bien, y espero seguirle, en su web, en su Facebook y en todo lo que haga, y si voy a Japón iré a reclamarle mi dinero…
H: Yo siempre voy al Festival de Yubari International Film Festival (en Hokaido) el año que viene será en marzo, allí hace mucho frío…
M: Un placer y muchas gracias.
Con esta historia, Na Hong-Jin vuelve a llevarnos al límite con un thriller escalofriante, tras regalarnos las magníficas The Chaser y The Yellow Sea. Con esta película, no solo nos traslada a una nueva localización, la Korea rural, sino que nos emociona y trastorna con una historia mística y aterradora. Los pequeños detalles, hacen de The Wailing, una de las películas más aterradoras de la última década, una lucha entre el bien y el mal, de la cual nadie puede escapar. The Wailing tiene un casting asombroso y muy bien cuidado: desde Jon-Goo, el policía paleta de pueblo (interpretado por Kwak Do-Won), pasando por su família, especialmente la pequeña actriz Kim Hwan-Hee (por qué los niños en Korea saben interpretar tan bien? Acaso les pegan? Los amenazan con matar a gatitos si no actúan correctamente? Ahora en serio, es una actriz estupenda y muy a tener en cuenta en el futuro), Hwang Jung-Min interpretando al chamán, Jun Kunimura como el japonés y Chun Woo-Hee como la mujer sin nombre. Todos y cada uno de ellos protagonistas de sus propios mundos, sus propias historias. Pero sobretodo, The Wailing habla de la mística, de las leyendas, del miedo y de las creencias. Sí, es una película larga, pero cada plano cuenta, cada paisaje habla y cada rayo de luz aporta más intensidad y tensión a la historia. 
