Director: Na Hong-Jin
Guión: Na Hong-Jin
Reparto: Kwak Do-Won, Hwang Jung-Min, Jun Kunimura, Chun Woo-Hee, Kim Hwan-Hee, Jang So-Yeon, Heo Jin, Jo Han-Chul, Son Kang-Kuk, Kim Do-Yoon
En el pequeño pueblo de Goksung empiezan a haber extraños casos de asesinatos en masa derivados, en un principio, por la ingesta de unas setas. El detective Jong-Goo y sus compañeros intentaran descifrar que misterio se esconde detrás de estas masacres. Los habitantes de Goksung empiezan a estar aterrorizados por los homicidios y especialmente del japonés que vive aislado en las montañas, de quién dicen que es un demonio. Cuando la hija de Jon-Goo empieza a tener los mismos síntomas que el resto de asesinos, Jon-Goo, abrumado por la situación y creyendo al resto del pueblo, decidirá contratar a Il-Gwang, un reconocido chamán. A la historia se añadirá Moo-Myeong (literalmente mujer sin nombre), quién junto a Il-Gwang, hará dudar constantemente a Jon-Goo sobre lo que está ocurriendo a su alrededor.
Con esta historia, Na Hong-Jin vuelve a llevarnos al límite con un thriller escalofriante, tras regalarnos las magníficas The Chaser y The Yellow Sea. Con esta película, no solo nos traslada a una nueva localización, la Korea rural, sino que nos emociona y trastorna con una historia mística y aterradora. Los pequeños detalles, hacen de The Wailing, una de las películas más aterradoras de la última década, una lucha entre el bien y el mal, de la cual nadie puede escapar. The Wailing tiene un casting asombroso y muy bien cuidado: desde Jon-Goo, el policía paleta de pueblo (interpretado por Kwak Do-Won), pasando por su família, especialmente la pequeña actriz Kim Hwan-Hee (por qué los niños en Korea saben interpretar tan bien? Acaso les pegan? Los amenazan con matar a gatitos si no actúan correctamente? Ahora en serio, es una actriz estupenda y muy a tener en cuenta en el futuro), Hwang Jung-Min interpretando al chamán, Jun Kunimura como el japonés y Chun Woo-Hee como la mujer sin nombre. Todos y cada uno de ellos protagonistas de sus propios mundos, sus propias historias. Pero sobretodo, The Wailing habla de la mística, de las leyendas, del miedo y de las creencias. Sí, es una película larga, pero cada plano cuenta, cada paisaje habla y cada rayo de luz aporta más intensidad y tensión a la historia.
Si necesitáis más información acerca de la película, no os podéis perder nuestro "destripe" personal en próximos artículos.
Lo mejor: Una experiencia única frente a la pantalla.
Lo peor: Que te despistes un momento y te pierdas una de las piezas importantes de la película.
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